La importancia de la enfermería geriátrica en el cuidado de las personas mayores
En las últimas décadas, como resultado de los cambios demográficos sufridos en el mundo occidental, la esperanza de vida ha incrementado notablemente, al tiempo que la tasa de natalidad ha disminuido, lo que se ve reflejado en muchos países en un envejecimiento poblacional relevante. En el caso particular de México, actualmente la esperanza de vida media es de 75 años y el número de personas que superan los 85 años crece año con año, razón por la que existe una mayor demanda de servicios sanitarios que permitan atender las necesidades de esta población. Es precisamente por el aumento de la demanda de servicios especializados en la atención de adultos mayores que hoy en día son más quienes se especializan en enfermería geriátrica y en esta ocasión hablaremos de la importancia de los servicios de estos profesionales médicos para la salud integral del adulto mayor.
Los profesionales médicos en geriatría cuentan con conocimiento sobre los cambios que se producen a raíz del envejecimiento en los órganos y sistemas del ser humano, ya sea de manera natural o por modificaciones generadas por patologías que en algún momento de su vida presentaron, o bien por padecimientos crónicos que degeneran gradualmente el funcionamiento normal del organismo. Estos conocimientos les permiten detectar de manera precoz los síndromes conocidos como geriátricos porque se presentan con gran frecuencia en la población de adultos mayores, entre los que se incluye la demencia, los delirios, las caídas, la incontinencia y la malnutrición, con el fin de determinar los tratamientos adecuados para manejar las distintas patologías que los afectan.
En este punto es necesario resaltar que las enfermedades que se presentan durante esta etapa de la vida, aunque pueden ser las mismas que desarrollan las personas a una edad más joven, adquieren características diferentes según los cambios fisiológicos y patológicos que acompañan la vejez, además pueden acompañarse de modificaciones sensoriales y cognitivas en el adulto mayor y llega a ser bastante común que se presenten de una manera atípica, sin que exista relación entre los síntomas detectados y la afectación en las funciones de los órganos, es decir, los deterioros funcionales pueden ser causa multifactorial por la mayor vulnerabilidad que se tiene cuando se alcanza la vejez.
Es por lo anterior que la herramienta diagnóstica principal para la atención de adultos mayores es la valoración geriátrica integral aplicada de manera dinámica, con la que se hace una evaluación cuantitativa del estado físico, psíquico y social del paciente, empleando la capacidad funcional como la variable principal para establecer los objetivos de asistencia para el tratamiento y cuidado de los pacientes. Es aquí donde la especialización en enfermería geriátrica cobra especial importancia, y lo que justifica que en entornos enfocados a ofrecer atención a adultos mayores, como las casas de retiro, cuenten con profesionales en esta rama.
A partir de la identificación de las necesidades del paciente y teniendo en consideración tanto su entorno como de su potencial de recuperación, el equipo de profesionales médicos, incluidos médicos, enfermeros, trabajadores sociales, psicólogos, terapeutas ocupacionales y fisioterapeutas, entre otros, establecen programas de tratamiento, rehabilitación y prevención, monitoreando constantemente los cambios producidos para hacer las modificaciones pertinentes en el programa, de modo que el paciente logre alcanzar los mejores resultados posibles.
Es la participación de profesionales en diferentes disciplinas en lo que se basa una atención integral al adulto mayor, pues únicamente mediante la adecuada gestión de recursos sanitarios y sociales que se adapten a las necesidades de los pacientes, las que se debe tener en cuenta cambian constantemente, se puede garantizar la continuidad asistencial necesaria para su cuidado. Aquí encontramos una de las razones por las que muchas personas alcanzada esta edad deciden de manera voluntaria retirarse a un asilo o casa de reposo, lugar en el que además de contar con atención de profesionales en geriatría, se controlan los recursos sociales que influyen en su bienestar.
Además de ofrecer una atención integral al adulto mayor, la geriatría tiene como objetivo prevenir la dependencia en esta etapa de la vida para permitir a las personas tener un envejecimiento activo. Es por esta razón que los médicos, enfermeros y profesionales en otras ramas de atención sanitaria no sólo se especializan en el tratamiento de patologías y afectaciones en la vejez, sino también en la implementación de medidas de prevención primaria, con la finalidad de reducir la incidencia de enfermedades, en medidas de prevención secundaria para disminuir la prevalencia de enfermedades, en prevención terciaria para compensar las secuelas causadas por la enfermedad, y en medidas de prevención cuaternaria con la finalidad de evitar daños por el uso de medios terapéuticos o diagnósticos.
Como parte de las medidas adoptadas en los diferentes niveles de prevención, los especialistas en geriatría promueven adoptar hábitos saludables, que incluyen realizar ejercicios físicos, lo que permite mantener una marcha adecuada, equilibrio y potencia muscular el mayor tiempo posible; seguir una buena dieta para mantener las necesidades energéticas del paciente y atender inquietudes creativas y la salud psíquica a través de actividades como la estimulación física e intelectual, e implementar actividades de disciplinas artísticas.
Otro aspecto que atiende esta especialidad es la seguridad asistencial, el que resulta de los más relevantes por el grado de vulnerabilidad de los adultos mayores. La seguridad asistencial se refiere a disponer de medios para detectar, valorar e intervenir en caso de que se presenten caídas y otro tipo de accidentes, así como trastornos de la marcha, aplicar procedimientos para garantizar el uso correcto de medicamentos y la prevención de reacciones adversas por el uso de fármacos, siendo estos factores de alto riesgo para los adultos mayores que pueden ser perfectamente prevenibles. Finalmente la geriatría se encarga de instaurar planes de cuidados paliativos en pacientes con insuficiencias avanzadas, en busca de ofrecerles la mejor calidad de vida posible y asesoría en la toma de decisiones.
Es por todo lo anterior que la intervención de profesionales sanitarios especializados en geriatría en la atención y cuidado de los adultos mayores resulta fundamental, y en Lumina Senior Care, conscientes de las necesidades de las personas que optan por una residencia temporal o permanente, en nuestras instalaciones contamos con profesionales en enfermería geriátrica. Si desean conocer todos los servicios que ofrecemos, los invitamos a ponerse en contacto con nosotros, con gusto los atenderemos.